9/18/2007

Anima Mundi



Hay libros que me han hecho reír, llorar, transporte a otros mundos, pero cuando terminé de leer el libro de Susana Tamaro “Anima Mundi” una extraña sensación me inundó. Comencé a llorar durante las tres últimas páginas. Fue una sensación de recordar todas las cosas que he hecho y las experiencias que he tenido la oportunidad de vivir.


“El amor no es solo entre un hombre y una mujer. El amor es atención”, le dijo Irene a Walter. Walter era un chico que huyó de su casa. Tuvo muchas ilusiones pero no pudo realizar algunas. Irene era una monja, bastante mayor. En un momento de sus vidas se encontraron y Walter había cuidado de ella hasta su muerte.

Cuando leía las últimas paginas, una sensación de vacío y de soledad me llenó. Recordé a las personas que he conocido, y que ya no están conmigo. Aquellas que fueron importantes para mí, pero que de una u otra manera cada vida tomó su propio camino. Y solo quedan los recuerdos de pláticas, risas y planes.

Tenía esa sensación de recordar los lugares donde he estado y que posiblemente no vuelva a estar. Tenía esa sensación de recordar las personas con las que he compartido muchas cosas, de las cuales he aprendido, han sido mi compañía, mi ilusión o mejor que eso, han sido mis amigos.

Venían a mi mente los recuerdos de historias agradables, de tardes o de noches alegres. Recuerdos de llamadas telefónicas, de escuchar una voz agradable y una risa. Recuerdos de personas que han significado mucho para mí, pero que nunca tuve el valor de decírselo, de decirle cuánto me importaban o cuánto las quería. Tuve esa sensación de que las cosas no son para siempre y que aunque nos queramos aferrar a ellas, lo mejor es dejarlas ir. Personas que han llegado a mi vida y se han ido.

Tenía esa sensación, de recuerdos guardados, de lugares, de historias. Recuerdos de paisajes maravillosos que he contemplado. Recuerdos de estar con alguien. Son todos esos recuerdos que te provocan esa sensación en tu corazón y que agradeces por haberlos vivido, aunque sea por una única ocasión.

5 comentarios:

Francisco Méndez S. dijo...

Hola: Algunos libros nos provocan sensaciones, son como mágicos. Nos despiertan y nos hacen pensar y emocionarnos. Saludos

Anónimo dijo...

Sensaciones intensas te provocó.
Hay libros que quedan marcados en nuestra retina para siempre.
Mejor no lo leeré, no quiero llorar, parece muy intenso emocionalmente, y yo ahora no puedo con eso.
Un beso Ena

Blue Cat dijo...

Que coincidencia, hoy me pregunto un amigo que que libro queria de regalo y le dije "no se" ahora ya se que le voy a pedir :) Que bonito llorar por cosas positivas, no?
y que bueno que tantas tantos recuerdos bellos, finalmente de eso se conforma la vida, de recuerdos, no? porque hasta lo que vivimos hace un instante es ya un recuerdo, hay que aprovechar la vida cada instante y atesorar todos los bellos recuerdos, besos y que tu vida siempre este llena de cosas para atesorar como recuerdos valiosos.

Isa dijo...

He vueltoooooooooo! solamente pasé para dejarte un abrazo grande , grande

Unknown dijo...

Hola a todos, tuve unos dias algo ocupaditos y hasta ahora entro otra vez a mi calle.

Ulysses gracias por visitar mi calle. Creo que este libro por alguna razon me causo todos estos sentimientos. He leido otros libros de la misma autora y hay uno mas "Querida Matilde" en el que tambien me senti muy identificiad.

Calma, tienes razon, a veces estamos de animo para cosas alegres y que llenen nuestro espiritu de otro tipo de experiencias o sensaciones. Mi escritor favorito es Jose Saramago, y de todos sus libros el que mas me ha gustado es "La Caverna" y con ese libro tambien rei y llore, porque pense mucho en mi abuelito.

Que me alegra verte en mi calle nuevamente.

Un beso

Blue cat, como estas? pues como dices que coincidencia. Lo unico que a veces tu puedes disfrutar mucho un libro y para la otra persona no sera la misma experiencia. Tengo un amigo que me super recomendo un libro, y por mas que hice el intento, no lo pude leer :(

bueno, un beso blue cat.

Luna, siiiiiii, ya vi que regresaste, te he dejado tambien un mensaje en tu blog. Que bueno, hacias mucha fatla.

un abrazo

El Amargo del Pomelo de Nacho Cano

Oleo de mujer con sombrero...Silvio en El Salvador