3/17/2007













Un diplomado en desarrollo personal

Hace unas semanas comencé a estudiar. En la clase habemos como 45 personas. El primer día todos nos presentamos diciendo el nombre, titulo o títulos obtenidos, lugar de trabajo y cargo. Hay muchos que poseen maestrías, doctorados, dos carreras, estudios en México, Estados Unidos y otros países. Casi la mitad trabaja en el FISDL, otra parte en diferentes ONG´s, CARE, CARITAS, FUNDE, etc.

“Es una buena oportunidad de conocer personas”, fue mi humilde pensamiento. Sin embargo, el primer día de clases únicamente hablé con “yo, mi otro yo, mi angelito y mi diablito”. El segundo día, decidí llevarme un librito para leer durante el receso y ese día también hablé únicamente con “yo, mi otro yo, mi angelito y mi diablito”. “Jueeela...” dije yo “y a la gente que le pasa, que no habla”.

El tercer día de clases, yo andaba con una camisa que dice Costa Rica, y mi profesor me dijo “Costa RRRica”....y yo le contesté “Purrra Vida”. Fin de la plática. Luego se hicieron grupos de trabajo para evaluar un control de lectura. Yo tenía ganas de decir que no lograba entender la “Ley de la escasez”, pero como todos tenían cara de haber entendido, pues me quedé callada. A medida que discutíamos la lectura, me di cuenta de que mis dificultades y los conceptos que me habían costado entender, les habían costado a ellos también.

La mayoría de personas se ven de unos 40 años. Sus rostros son serios y sus ojos sin ningún brillo y esquivan la mirada cuando se les trata de ver a los ojos. Solamente el grupo del FISDL hablan y comentan entre ellos las cosas de trabajo. Los demás, pues somos los “individualistas” y poco a poco avanzamos en pláticas forzadas, a más de un “Buenos días”.

Hace unos días, mis sobrinitos estaban en la casa y llegaron unos amigos de mis papás con sus dos hijitas. A los pocos minutos ya estaban jugando, corriendo, contando chistes, contando sus experiencias del colegio. Desde mi cuarto escuchaba sus risas, la familiaridad que tenían para tratarse de “vos”, el bullicio de sus vocecitas tratando de reírse y hablar al mismo tiempo. Vino a mi mente mis compañeros y compañeras de clase, de los cuales no me sé el nombre de ninguno de ellos.

La tecnología avanza a grandes pasos. Por cualquier medio podemos comunicarnos con alguien de Asia o de la India; sin embargo, nos volvemos más impersonales día con día. A veces no conocemos las historias de las personas que están a nuestro lado, ni conocemos sus gustos, cómo es su familia, cómo son sus hijos.

Algo que siempre me ha gustado es escuchar las historias de mi abuelito. Él siempre empieza a hablar diciendo “allá por el mil novecientos...” e inmediatamente me traslado a otro mundo. Y sin tener ningún titulo, ni haber viajado a otros países sus historias son maravillosas y sus pláticas entretenidas, hacen volar mi imaginación y viajo a otra época, conozco otras personas. Es todo más simple y su visión de mundo es mejor.

Estudiamos supuestamente para mejorar, para desarrollar nuestras habilidades y nuestros conocimientos; sin embargo, a medida que crecemos nos volcamos a nosotros mismos. Lo que “yo” pienso y lo que “yo” quiero. El “yo” sobre todo lo demás. Dejamos de lado los intereses y gustos de las otras personas. Nos interesamos menos por las personas que nos rodean. Podemos tener una carrera universitaria, estudiar y capacitarnos, pero nos resulta tremendamente difícil acercarnos a alguien, mirarlo a los ojos y decirle: “Hola, como te va?”

Los hombres y las mujeres complicamos todo. Las cosas más simples las convertimos en cosas difíciles. Creo que a veces necesitamos convertirnos un poco en niños y darnos la oportunidad de conocer a las personas que están a nuestro lado. Valorar la riqueza interior que cada uno tiene. Y si podemos, como decía algún correo que leí, brindar una sonrisa y un saludo, ya que no sabemos a quién le podemos alegrar el día.

6 comentarios:

Paloma Cancino dijo...

Hola!
Gracias por visitarme y de esta manera invitarme hasta acá, tu casa virtual.
No sabes como te entiendo, claro hemos olvidado ser niños, será por prejuicios, por timidez o simplemente porque el mundo corre muy rápido, yo trato de mantener a mi niña revoltosa muy presente en mi vida diaria, mis dibujos lo son un poco.
No lo sé, lo que si se es que derribar las barreras toma un tiempo pero se da.
Falté yo en ese curso pa conversar un rato ;)

Gracias por agregarme entre tus links, ya sabes estás invitada a casa cuando quieras
Un abrazo
Paloma

Solo Palabras... dijo...

Ena, estoy plenamente de acuerdo. es más, si nos detenemos a analizar todo en la sociedad destaca el valor del yo personal por encima del tejido colectivo que es la sociedad.
No importa que haya gente viviendo en la calle y alimentándose de tachos de basura mientra podamos comprar un celular que cuesta 400 dólares o una PC de 1500 o lo que sea. Es más. cuanto más podamos tener y menos ellos, más exitosos. Entonces, para ser exitosos hay que competir y la mejor forma de competir es ignorar todo de quien está a nuestro lado.
Te dejo un beso

Unknown dijo...

Hola, Paloma, muchas gracias por visitar mi calle...Por la manera en que dibujas pues si te imagino muy alegre y revoltosa...creo que el mundo seria mucho mejor, con mas personas como vos...

Ena

Unknown dijo...

Hola, Oscar, he visto tus blogs. La cancion de Alejandro Sanz y Lena es de mis favoritas...lo mejor que en el video, la direccion en el sobre de Alejandro Sanz dice "La calle del pensamiento", como mi blog...jejeje.

Y bueno, a pesar de estar en paises supuestamente diferentes, tenemos algunas cosas en comun...aqui estan acabando con reservas naturales para construir calles y super residencias...y el unico arrecife de coral del pacifico en el lado de Centro America, tambien esta siendo destruido para construir un muelle, y unas rocas volcanicas fueron removidas y pusieron otras en su lugar...eso no es tener conciencia ambiental...eso es tener poder y mucho dinero...

Pero bien, tenemos el poder de la palabra, tu lo manejas muy bien...me han gustado tambien tus fotos...

Espero seguir visitandote y siempre te espero en esta mi calle, aqui en El Salvador

Ena

Juan Lucas dijo...

Mi querida Ena, siempre visito tu casa y me quedo sentado un rato en ella imaginando como serás y me tomo un café pensando que tu vas a llegar a darme los buenos días o las buenas tardes.
Ena, gracias por tus palabras, por tus comentarios en mi blog, la verdad es que nunca voy a entender, no a esta sociedad como tú describes tan maravillosamente en tu post, sino al destino, a la suerte o a dios... que hace que almas parecidas, personas que desean conocerse estén tan distanciadas el uno del otro.
Besos mi dulce Ena.
Juan Lucas.

historia dijo...

amiga ena:
la comunicación tecnológica avanza a mil por hora, moderna y sin límites........la comunicación entre nosotros retrocede a mil por hora, cada vez ponemos más límites entre nosotros mismos......

nos vamos a convertir en un mundo silencioso controlado por máquinas y nosotros, "frios robots".......

hablo en plural, porque pertenecemos a este mundo, no nos podemos abstraer.......lo que podemos hacer es parar esto a tiempo, y volver a ser las buenas, inocentes y sinceras personas que fuimos alguna vez.......


un beso,

El Amargo del Pomelo de Nacho Cano

Oleo de mujer con sombrero...Silvio en El Salvador